DE ESTE FOGÓN
_____________________________________________________________
¡Ah... mi Santa Fe...
de sólo nombrarte se me hacen dulces los amargos... Y digo para mí, en mi ignorancia, que no ha de haber tanta lindura en otro pago, ni río más gaucho, ni terrón más fecundo; ni cielo más azul que el que estoy viendo besar tus islas y tus pájaros...
¡Ah, mi Santa Fe... si he de morir dormido... que sea entre tus brazos!
de sólo nombrarte se me hacen dulces los amargos... Y digo para mí, en mi ignorancia, que no ha de haber tanta lindura en otro pago, ni río más gaucho, ni terrón más fecundo; ni cielo más azul que el que estoy viendo besar tus islas y tus pájaros...
¡Ah, mi Santa Fe... si he de morir dormido... que sea entre tus brazos!
(De "Qué linda es mi Santa Fe", de Nobel Passaglia)
_____________________________________________________________
De marca santafesina
Cuando me lleve a sus pagos
el que me trajo a este mundo,
este fogón, de seguro,
no ha de quedar apagado,
pues siempre habrá algún paisano
que le arrime unas ramitas,
cantando alguna coplita
o escribiendo con su letra
cosas que han de ser bien nuestras
¡...de marca santafesina!
Cuando me lleve a sus pagos
el que me trajo a este mundo,
este fogón, de seguro,
no ha de quedar apagado,
pues siempre habrá algún paisano
que le arrime unas ramitas,
cantando alguna coplita
o escribiendo con su letra
cosas que han de ser bien nuestras
¡...de marca santafesina!
(De "Qué linda es mi Santa Fe", de Nobel Passaglia)
DE LA NOVELA
Prólogo de Orlando Vera Cruz a la Primera Edición de Silbidos en la Huella
Contratapa de SILBIDOS EN LA HUELLA Primera Edición